Nuevas cuestiones de fonología mozárabe (Gredos, Madrid, 1990), cuya tesis central postula la continuidad lingüística entre el romance anterior a la reconquista (o mozárabe) y el valenciano, que no constituiría una derivación directa del Idioma catalán.
También, y con mayor amplitud, sobre los dialectos románicos, simplificados en la taxonomía tradicional como "mozárabe", hablados en gran parte de la península ibérica (del Duero a Gibraltar) en época de orígenes.
Nuevas cuestiones de fonología mozárabe, donde se mantiene entre otras tesis, la conexión del valenciano con el mozárabe (el románico o dialecto neolatino) anterior a la reconquista, fue criticada por algunos autores (C. Barceló,[5] A. Ferrando,[6] G. Colón,[7] etc.).
La obra se referencia frecuentemente como fuente de información objetiva acerca de la historia lingüística peninsular en autores prestigiosos como F. Marcos Marín[26], J. M. Lipski, Ralph Penny[27], Bustos Tovar[28] y otros tantos filólogos.Por otra parte, las investigaciones de Peñarroja en lo que se refiere a la vida de los cristianos bajo el islam, ordinariamente bien valoradas [29][30][31][32][33][34][35], son objeto de referencia frecuente entre especialistas.
Anaquel de Estudios Árabes (Francisco Abad).