El sitio G (Site-G) pertenece al Plioceno, datado, con el método potasio-argón 3.7 millones de años antes del presente.
[6] Otras cinco huellas bípedas consecutivas habían sido descubiertas desde 1975 en el sitio A, por Peter Jones y Philip Leakey.
Sin embargo, estudios detallados desde 2019 en el sitio A, permitieron producir un archivo digital utilizando fotogrametría 3D y escaneo láser, mediante los cuales se determinó en forma concluyente que se trata de las huellas de un hominino.
Los pies no tienen el dedo gordo móvil como los simios, en cambio tienen un arco típico de los humanos modernos.
El estudio de estas huellas indican un bipedismo completo (semejante al del hombre moderno), apoyando primero el talón, luego el arco, y finalmente los dedos, haciendo fuerza en estos, especialmente en el dedo gordo para adelantar el cuerpo y separar el pie del suelo.