La condesa Maritza

Aún se aprecia mucho en nuestros días gracias a su soberbia partitura.Con producción del nuevo gerente del Theater an der Wien, Hubert Marischka (que además asumió el rol de Tassilo), con Betty Fischer (como la condesa), el cantante de variedades Max Hansen (como el barón Zsupán), Richard Waldemar y Hans Moser, La condesa Maritza conoció un estreno sensacional representándose sin interrupción durante más de un año.El teatro Shubert de Nueva York adquirió los derechos americanos y encargó a Harry B. Smith que lo adaptara al inglés.Cuando Yvonne d'Arle entró en escena, con dos perros lobos de Rusia, un pedazo del decorado se cayó, mientras que Hope Hampton, que se había presentadopara el papel, estando entonces en su casa, y sin duda alegre.El público apreció el bello aria de Tassilo cantado en Viena por Hubert Marischka «Komm, Zigany», traducido al inglés «Play Gypsies - Dance Gypsies» y al francés «Joue, Tsigane!» ("Tocad, gitanos").El director de orquesta fue Anton Paulik del Theater an der Wien.Tassilo confía en ganar una dote para su hermana Lisa — ella desconoce el empobrecimiento de la familia.Pero este idilio va a terminar: el príncipe Populescu, un viejo Don Juan, llega y anuncia que la condesa Maritza lo seguirá para celebrar allí su compromiso.Todos los invitados han llegado ya, pero el compromiso es sólo una simulación, ella en secreto confiesa a una amiga, que quiere librarse de sus admiradores.El barón Zhupan ha leído sobre su propio "compromiso" en los periódicos y ha decidido venir.Repite el estribillo de su aria "Eh, gitano", y su dúo pone fin al primer acto.Se gustan y Zhupan repite veinte veces que si él no amara a Maritza, habría soñado con Liza esta noche.Hay una serie de versiones de la opereta en cine, incluyendo: Gräfin Mariza (1932), dirigida por Richard Oswald con Dorothea Wieck y Hubert Marischka; Gräfin Mariza (1958), dirigida por Rudolf Schündler con Christine Görner y Rudolf Schock; Gräfin Mariza (1974), dirigida por Eugen York con Ljuba Welitsch y René Kollo.