La Virgen en una iglesia

La Virgen en una iglesia es una pequeña tabla al óleo del pintor primitivo flamenco Jan van Eyck.La obra, realizada aproximadamente entre los años 1438 y 1440, muestra a la Virgen María con el Niño Jesús en brazos en una catedral gótica.Erwin Panofsky interpreta esta composición como si las principales figuras de la tabla fueran esculturas que han cobrado vida.Al igual que las representaciones bizantinas de la Virgen, Van Eyck presenta una María monumental, exageradamente grande comparada con su entorno.Las copias casi contemporáneas del Maestro de 1499 y Jan Gossaert emparejan esta imagen con dos imágenes diferentes en la derecha: una de ellas es un donante arrodillado en un interior; la otra es una escena al aire libre donde el donante es presentado por su santo patrón San Antonio.Ambos pintores hicieron cambios significativos en la composición de van Eyck, quizás adoptando las modas del momento, aunque tales copias han sido descritas como «espiritual, si no estéticamente, desastrosas con el concepto original».Actualmente hay consenso en que fue terminada hacia 1438-1440, sin embargo sigue habiendo quienes la sitúan en fechas tan tempranas como 1424-1429.A principios del siglo XX, Ludwig von Baldass lo fechó en torno al 1424-1429, y por un largo tiempo se situó la obra hacia 1430.[7]​ En los años noventa, Otto Pächt consideró que podía tratarse de un trabajo tardío de Jan van Eyck, pues había características en común con el tratamiento del interior del matrimonio Arnolfini, fechado en 1434.[12]​ La pintura muestra a María llevando una capa azul oscuro —color utilizado tradicionalmente para enfatizar su humanidad— sobre un vestido rojo.[13]​ En su cabeza hay una corona, y en los brazos lleva al niño Jesús que descansa los pies en su mano izquierda.Detrás de las figuras principales, en el coro alto, hay una hornacina con una escultura de la Virgen entre dos velas encendidas, y a la derecha se ven dos ángeles cantando (quizás los mismos himnos que había inscritos en el marco).[17]​ Los rayos de luz entran por las ventanas superiores e iluminan el interior.[18]​ Las sombras arrojadas por la catedral pueden ser vistas junto al coro y cerca del pasillo.[13]​ Pero el ángulo de estas sombras es llamativamente realista para principios del siglo XV, y es tan detallado que parece estar basado en la observación del comportamiento de la luz, lo cual es una innovación posterior.[18]​ [21]​ En la parte inferior se leía FLOS FLORIOCOLORUM APPELLARIS; y en los lados y parte superior continuaba MATTER HEC EST FILLIA PATER EST NATUS QUIS AUDIVIT TALIA DEUS HOMO NATUS ETCET («La madre es la hija.[13]​ Algunos estudiosos sugieren que las inscripciones buscaban dar vida a otras estatuas y representaciones de María.[25]​ Van Eyck representa la arquitectura con una precisión que no se había visto antes en la pintura del norte de Europa.La relación entre las partes del edificio no es mostrada en su totalidad, y la transición entre el primer plano y el fondo está oculta por la figura de la Virgen, que tapa los pilares del crucero; el suelo de la mitad es prácticamente eliminado, y nuestra visión no llega a ser consciente de este hecho.[13]​ Las dos velas que iluminan la estatua, en la hornacina del fondo, son símbolos de la encarnación, bañada en la luz natural.La pintura, casi una miniatura por sus dimensiones, presenta a una María de proporción irreal comparada con la iglesia donde se encuentra.Esto habría sido atractivo para Felipe el Bueno, que si bien realizó varias peregrinaciones en persona, también hay registro de que pagó a Van Eyck para realizar una peregrinación de su parte en 1426, lo cual era una práctica aceptable en la época.El marco tiene enganches, por lo que anteriormente iría unido a otra tabla.[48]​ Por otro lado, la composición parece estar simétricamente equilibrada si se completa con una pintura en la derecha: María dirige su mirada más allá de la tabla, y podría estar mirando a un donante arrodillado.[55]​ La Virgen de 1499 es una adaptación donde el artista ha cambiado varios elementos, pero los historiadores del arte consideran que estas alteraciones han perjudicado a la composición.[57]​ Ambas copias omiten las manchas de luz en el suelo, eliminando un elemento místico que había en la obra original, [58]​ quizás porque su significado no fue captado por estos artistas posteriores.[59]​ Por otro lado, que Gossaert siguiera otros aspectos del original con gran fidelidad evidencia la alta estima que sentía por la habilidad técnica y estética de Van Eyck, y su versión es vista por algunos como un homenaje.[54]​ Entre 1520 y 1530 el iluminador de Gante Simon Bening, creó una Virgen con el Niño que recuerda tanto a la tabla de Van Eyck que podría ser considerada una copia perdida.[63]​ En 1877 la pintura fue robada, y se recuperó diez días después, pero sin el marco.Sin embargo, su autenticidad fue verificada poco después, y el catálogo del museo de 1904 ya atribuye la obra a Jan van Eyck.
La Virgen en la iglesia (detalle). Se puede observar la estatua de la Virgen detrás; a la derecha dos ángeles cantan.
Detalle de ventana situada a la izquierda de la tabla.
Detalle de la crucifixión, en la parte superior derecha
Anunciación , Jan van Eyck, c 1434. Galería Nacional de Arte , Washington D. C.
Maestro de 1499 , Virgen y el Niño con un retrato del abad Christiaan de Hondt ; Museo Real de Bellas Artes, Amberes.