El término japonés Koryū budō (古流武道) se puede traducir literalmente como «antigua escuela» o «estilo clásico».
Se utiliza para denominar a aquellas artes marciales que surgieron antes de la restauración Meiji del siglo XIX.
Las artes marciales modernas surgidas y popularizadas con posterioridad a este evento, al final del siglo XIX y durante el siglo XX son las denominadas Gendai budō, estas suelen entenderse como disciplinas adaptadas a las necesidades existentes en nuestra sociedad actual, más orientadas al desarrollo personal, técnico y físico del individuo, en ocasiones también como deportes, y en algunos casos también para su uso en la defensa personal llegado el caso.
Algunas de estas disciplinas modernas son: el aikido, el kendo, el kobudō, el iaidō, el jōdō, el kárate (arte marcial originado por la nobleza de Okinawa, y posteriormente japonizado en el siglo XX), y el judo.
En cambio, las artes marciales clásicas clasificadas como koryū son las enseñanzas que provienen directamente de la cultura militar feudal japonesa, y respondían a las necesidades de supremacía y supervivencia, predominantes en dicho contexto histórico y social, siendo por lo tanto la efectividad en combate algo primordial, aunque no necesariamente en detrimento del desarrollo personal del individuo.
Estas escuelas o ryū estaban normalmente dirigidas exclusivamente a la clase guerrera samurái, y enseñan a combatir con todo tipo de armas, propias de su época.
Una fuente de referencia consultada con frecuencia es el Bugei Ryuha Daijiten, una enciclopedia sobre artes marciales, sus orígenes y tradiciones escrita por Kiyoshi Watatani, pero no es la única fuente ya que a pesar de la completa investigación de Watatani no todas las artes quedaron registradas.
La otra fuente podrían ser los registros del Dai Nihon Butokukai creado en 1895 para regularizar y organizar las artes marciales en Japón, pero más allá de algún material en su museo la mayoría de los documentos parecen haber sido destruidos o por lo menos dispersados durante el final de la Segunda Guerra Mundial.
La siguiente lista cita una serie de koryū bien conocidas y consideradas como completamente legítimas.