La revista sería el equivalente impreso de la Radio Télévision Libre des Mille Collines (RTLM), la cual surgió posteriormente, publicando artículos muy duros que criticaba generalmente al FPR y a la comunidad tutsi.Debido a los estrechos vínculos entre la revista y el régimen, fue una pieza fundamental para que el régimen de Juvénal Habyarimana propusiera sus ideas pero, aun así, Kangura no dudaba en criticar al mandatario por las concesiones percibidas durante los Acuerdos en Arusha, realizados entre 1992 y 1993, con el grupo rebelde Frente Patriótico Ruandés (FPR).Si bien en un principio el CDR surgió como rechazo a las propuestas de negociación establecidas por Habyarimana y su régimen, pronto desarrolló una vía propia.[2] Las extensas conexiones de Kangura con la elite gobernante proporcionó a la revista un conocimiento interno.[1] En otro artículo de la misma edición, afirmaba que los tutsis estaban preparados para la guerra en la cual ''no dejarían sobrevivientes''.En otra edición publicada en noviembre de 1991, Ngeze preguntó "¿Qué armas debemos usar para acabar por completo con las cucarachas?""[6] Kangura también realizaba amenazas contra Habyarimana, especialmente después de que sus patrocinadores se mudaran del MRND al CDR.Su juicio, en conjunto con los cofundadores de la RTLM Ferdinand Nahimana y Jean-Bosco Barayagwiza, fue la primera en establecer que las organizaciones de medios habían sido responsables por haber incitado el genocidio, hecho comparable con el caso editor nazi Julius Streicher, condenado en 1946.