En la comarca de Oldenburg (Alemania), por ejemplo, es costumbre recolectarla los días en los que ha caído una helada o ha nevado.Suele ser habitual elegir un Rey de la col rizada entre los comensales que mayor cantidad han ingerido.Es habitual encontrarla por estas fechas en los mercados siempre rodeada de hielo picado o nieve.En los Países Bajos se come en un plato considerado plato nacional de invierno denominado stamppot boerenkool que es una mezcla de col rizada y patatas servida con una salchicha denominada Gelderse rookworst igualmente ahumada.Las enzimas (Fosfofructoquinasa) se frenan fuertemente con las bajas temperaturas mientras que, al mismo tiempo, la fotosíntesis sigue produciendo los azúcares.[5] Sin embargo, no parecen alterar la función tiroidea en humanos en cantidades realistas en la dieta.
Tradicional plato danés de año nuevo; incluye col crespa guisada.