A los once años compaginaba sus estudios con el trabajo, montando y vendiendo cajas de cartón.
Mujer con grandes dotes de liderazgo, aprendió a manipular el fusil y el revólver y se convirtió en instructora de los voluntarios que iban al frente.
El 13 de noviembre llegaron las Brigadas internacionales y se reunió con la plana mayor del PCE para escuchar la arenga de Vittorio Vidali, conocido como el Comandante Carlos.
Un tiempo después, en pleno frente de Carabanchel, Julia se casó con su compañero Hernán Pérez.
[3] La creación del Ejército Popular de la República absorbió al Quinto Regimiento.
El presidente Francisco Largo Caballero ordenó que las mujeres fueran retiradas del frente.
Volvió a Madrid y se casó con Gonzalo Gil El Chalo, un antiguo compañero de armas.