Jaraquemada se dirigió al lugar y decidió ahorcar a los mapuches más sospechosos.
El tanto, en Angol, dos soldados españoles habían sido sorprendidos realizando actos de sodomía o practicando la homosexualidad.
[1] Desde entonces, Jaraquemada debió enfrentarse a partidas que actuaban aisladamente por todas las comarcas fronterizas.
Por esto se debió limitar, durante enero de 1612, a realizar las habituales e ineficaces expediciones punitivas, quemando ranchos y sembrados.
Se aprobó implementar la Guerra Defensiva, un sistema propuesto por el jesuita Luis de Valdivia.
Enterado de la noticia, Jaraquemada escribió al rey expresándole: Sabiendo que dejaría el cargo, Jaraquemada dedicó el mes de febrero a reprimir una sublevación que recorría toda la línea del Río Biobío.