Juan de Astorga

[1]​ En 1793 comenzó sus estudios en la Real Escuela de Tres Nobles Artes.[1]​ En 1802 tuvo a su primer hijo, Francisco, que se ordenó sacerdote en 1825 y que llegó a ser deán de la Catedral de Córdoba en 1865.[6]​ Hacia 1812 pasará a residir en la calle Amor de Dios, número 37.A tal efecto se nombró una comisión llamada "de museo", presidida por el canónigo Manuel López Cepero, en la que también estuvo Astorga.[10]​ En la década de 1840 se mudará a la calle Trajano, número 6.Tuvo lugar una misa corpore insepulto en la Iglesia de San Miguel.En lo que respecta al academicismo, aprendió un dibujo correcto, mesura en las composiciones, evitar todo entusiasmo y afectación en la obra y ausencia de toda violencia en las actitudes y todo aquello que produjese movimientos exagerados o faltos de naturalidad.También aprendió de libros como «El Parnaso español, pintoresco y laureado» (Antonio Palomino, 1724), «Diálogos sobre las artes del diseño» (Cayetano Bottari, editado en español en 1801), «Las proporciones del cuerpo humano medidas por las más bellas estatuas de la antigüedad» (Gérard Audran, editado en español en 1780)[12]​ y «Conversaciones sobre la escultura» (Nicolás de Arce, 1786).[13]​ En lo que respecta al romanticismo de esta primera etapa, que durará hasta mediados del siglo XIX, se aprecia la valoración de lo nacional y lo regional.Para este artista, las cofradías son el motor que impulsa esa espiritualidad.
Virgen de la Presentación. Hermandad del Calvario. Sevilla.
Juan de Astorga en 1819
Taller de Juan de Astorga. Óleo sobre lienzo realizado en 2019 por Fernando Vaquero
San Juan, las Tres Marías y los dos Santos Varones, realizados por Juan de Astorga, acompañan a la Virgen de Villaviciosa conformando el paso de misterio del Duelo. Hermandad del Santo Entierro. Sevilla.
Cristo de la Providencia. Escuela de Cristo. Sevilla.