Juan López de Pineda
Debía tener un talento precoz, ya que tras el fallecimiento del organista Manuel José Marín solicitó la participación en la oposición para ocupar la vacante, cuando todavía era mozo de coro, «para ejercitar y mérito».[1] Pocos meses después, quizás por diferencias con el nuevo maestro de capilla, Antonio Abadía, sin duda buscando perfeccionar su formación, partió a Madrid, donde estudió en la organistía de la Capilla Real con José Lidón.Juan López fue el único candidato que se presentó y fue examinado en órgano por el Sochantre y en composición por Vicente Almántiga, uno de los interinos que estaba sustituyendo al maestro.En el proceso se le recordaron sus obligaciones, entre las que destacaron la enseñanza de los mozos del coro.Ese mismo año fue el examinador del nuevo sochantre, Eugenio Díaz, que anteriormente estaba en la Colegiata de Escalona.[1][2] Al parecer se desplazó a Lucena, donde posiblemente trabajó en alguna capacidad musical en la iglesia parroquial de San Mateo.El maestro Zameza fallecía en 1796 y López ganó las oposiciones que se prepararon para cubrir la vacante, por lo que reunió ambos cargos a partir de ese momento.