[1] Su sugerencia al príncipe de que adoptase un cierto liberalismo, sin embargo, le hizo caer pronto en desgracia y perder su cargo ministerial.
[8] Para empezar, se le encargó traer a Serbia al nuevo príncipe.
[9] A continuación, tuvo que granjearse la aquiescencia de las potencias, principalmente de Rusia, para aprobar una nueva Constitución sin el permiso del Imperio otomano, del que el principado formaba parte.
[16] Durante su gobierno, las relaciones con la Sublime Puerta empeoraron notablemente, a consecuencia del nacionalismo de Ristić.
[19][20] Consciente de los límites del principado, esperaba, sin embargo, que la extensión del conflicto obligaría a Rusia a intervenir en él y que el resultado de la contienda permitiría la expansión serbia.