José Pradas Gallén

En 1700 entra, como infantillo, en la Catedral Metropolitana de Valencia.

[1]​[2]​ José Pradas Gallén es uno de los compositores más relevantes del barroco musical español del siglo XVIII y ha sobrevivido al transcurrir de los siglos más de 400 obras, conservadas en la Catedral Metropolitana de Valencia,[1]​[2]​ el Real Colegio del Corpus Christi (Valencia), la Catedral de Castellón, la Biblioteca Nacional de Madrid o la biblioteca del Monasterio de El Escorial entre otros sitios.

Las aportaciones de Pradas a la música de siglo XVIII afectaron directamente al desarrollo del villancico del barroco.

En este género considerado hispánico por excelencia, es donde filtrará los nuevos elementos compositivos, aunque también aplicará la moda italiana en sus composiciones latinas.

En este sentido, en la producción de Pradas encontramos que, por una parte, aparecen nuevos instrumentos (primero violines y posteriormente trompas, oboes, flautas) así como un mayor protagonismo de los mismos y por otro lado, en cuanto a la misma estructura se refiere, este maestro supo añadir a los elementos más tradicionales del estribillo y las coplas, las novedades importadas de la cantata italiana (como el recitativo y el aria) e, incluso, otras secciones con aires de danza (como el minué), de manera que sus “villancicos-cantata” representan la evolución de este género durante el siglo XVIII.