Tonkín oriental mantuvo su vicario, Jerónimo Hermosilla, y se nombró como coadjutor al padre Alcázar, mientras que en Tonkín oriental se nombró como vicario a Domingo Martí y como coadjutor a Díaz Sanjurjo.
Con esta reforma también se nombró a Díaz Sanjurjo obsipo de Platea, una ciudad en Beocia (Grecia).
Desde allí fue enviado a Tuan-Phu y posteriormente a Nam-Dinh, capital de la provincia meridional, desde donde escribió:[5] Este pecador rictus in Domino, saluda y se despide de todos hasta la gloria.
Confío me ayudarán con fervorosas oraciones a conseguir el don de fortaleza y perseverancia final.
Supongo que me restan pocos días, pero entre estos leopardos-sanguijuelas se hacen ellos muy largos.
Hay mucho empeño en coger al P. Trac [religioso indígena de la Orden].