Elegido diputado por Lima (1860-1865),[1][2] posteriormente dirigió la Sociedad de Beneficencia Pública (1865), iniciando después un largo viaje por Europa, recorrió Francia, España, Gran Bretaña, Bélgica, Holanda, Suiza y Alemania.
Nombrado ministro plenipotenciario en Alemania y Rusia (1873), a su regreso fue elegido senador por Loreto en 1874.
La misión estaba integrada además por Fernando Casós como secretario y por Hernando de Lavalle como oficial adjunto del ejército.
Tuvo una tarea penosa desde un inicio, ya que fue recibido con hostilidad por algunos pobladores chilenos, que reunidos en turbas, lanzaron insultos y amenazas contra los diplomáticos peruanos y atacaron a pedradas el consulado peruano.
Lavalle, que lo conocía pero se le había instruido no reconocerlo, no quiso pronunciarse al respecto y solo se limitó a decir que pediría informes a su cancillería.
No obstante, Lavalle continuó con sus tratativas para buscar una fórmula que llevara a la paz.
Dedicado a escribir tradiciones y obras históricas en sus últimos años, usó con frecuencia el seudónimo de Perpetuo Antañón, colaborando periódicamente en El Ateneo de Lima, El Perú Ilustrado y La Opinión Nacional.
Asimismo, fue uno de los socios fundadores del Club Nacional, institución establecida en Lima en 1855.