Fue condenado y sentenciado a 120 años, por conspiración para asesinar, en base al testimonio de Otto Fibonacci, quien vio como Abruzzi ordenaba a otro gánster el asesinato de dos hombres.
Temiendo por su vida también, T-Bag accede a quedar fuera del plan de escape.
Sin embargo T-Bag aprovecha esta debilidad para rajarle la garganta tan pronto como se dio vuelta.
Abruzzi, sin embargo, sobrevive y se reúne con el grupo de presos que pretende fugarse dos semanas después.
Finalmente, junto con Michael Scofield, Lincoln Burrows y otros presos, consigue escapar de prisión.
Abruzzi rápidamente solventa la situación tomando a la hija del cazador como rehén y haciendo que baje su arma.
Mahone le pide que la tire al suelo y se arrodille con las manos tras la nuca.