Ingresó en el Colegio Naval en 1859 a la edad de doce años.
Mientras estaba embarcado en la Goleta Covadonga, fue herido y hecho prisionero en el combate naval de Papudo que sostuvo con la corbeta chilena Esmeralda.
Propuso al almirante una salida nocturna escalonada para evitar la pérdida total de la escuadra, pero ésta fue desestimada.
A solicitud de su viuda, se trasladaron sus restos a España en el crucero Conde de Venadito junto con los del almirante Cristóbal Colón.
[1] Descansa en el Panteón de Marinos Ilustres en San Fernando (Cádiz).