Jiuaz Dospánova

[3]​ Cuando terminó el primer año en la universidad, comenzó la Gran Guerra Patria.

El regimiento estaba formado íntegramente por mujeres voluntarias, desde las técnicos hasta las pilotos, todas ellas de una edad cercana a los veinte años.

Sus piernas desarrollaron gangrena, pero el médico se negó a amputárselas, diciendo que las necesitaría.

Seis meses después regresó a su unidad, pero el comandante de la unidad la transfirió al cuartel general para trabajar como jefa de comunicaciones del regimiento,[9]​ ya que seguía teniendo enormes dificultades para usar las piernas, por lo que necesitaba ayuda para entrar y salir de la carlinga del avión.

A la edad de 23 años ingresó en la Escuela Superior del Partido en Almatý.

En 2017, la escultura «Gloriosas hijas del pueblo kazajo» se inauguró en Uralsk en la plaza Manshuk Mamétova.

[15]​[16]​ Su ejemplo y valor aún hoy en día es recordado en su natal Kazajistán.

«Esta la legendaria Jiuaz Dospánova, quien sirvió en el regimiento femenino de bombarderos nocturnos.

[17]​ A lo largo de su vida Jiuaz Dospánova recibió las siguientes condecoracionesː[18]​ Otras mujeres kazajas que combatieron en la Segunda Guerra Mundial