También habría sido este Jeníades quien puso en contacto a Mónimo de Siracusa con Diógenes.
[2] No se sabe cuál fue la época de florecimiento del filósofo Jeníades.
Cuanto se sabe sobre él procede de dos pasajes de Sexto Empírico localizados en sendas obras del mismo (Adversus mathematicos e Hipotiposis pirrónicas).
[3] En los Esbozos pirrónicos, Sexto cuenta a Jeníades, de nuevo junto a Jenófanes, entre los filósofos que negaron la existencia de un criterio que determine lo verdadero y lo falso.
[7] A. Piqué Angordans, en su edición (en catalán) de los fragmentos de los sofistas, escribe sobre Jeníades que «en él se manifiesta la tradición, a menudo subterránea, del escepticismo, más o menos genuino, de la filosofía griega»[8]