Generalmente estos juegos presentan a múltiples jefes, donde cada uno es más complicado que el anterior.
En la mayoría de los casos, los jefes son secuaces del jefe final, adhieren con su causa y su único objetivo es el de fungir como pruebas que realizan al jugador para comprobar si esta preparados para seguir avanzando con el juego o para darle fin a la aventura.
Esto permite salvar la partida en el último movimiento del jefe, incluso la barra de vida que le quedaba en ese momento se guardará, al cargar repetirá siempre ese movimiento y conservara la porción de vida que se ha guardado, con este mismo truco el jugador puede derrotar al jefe sin recibir ningún impacto y conservando la vida, facilitando la tarea de derrotarlos para avanzar en el juego.
[cita requerida] El jefe final suele ser el villano con el que peleas para terminar la historia principal del juego.
Como por ejemplo, The Legend of Zelda: Oracle of Seasons/Ages (GBA), donde al vencer a Onox/Veran respectivamente se disparan los créditos, no obstante, todavía falta derrotar a Ganon luego de haber hecho una serie de eventos.
Está otra variante del anterior especie de jefes, la mayoría son gente inocente que simplemente están cumple su trabajo y a veces no tienes opción de luchar contra ellos o matarlos si la situación lo requiere, suelen ser desde policías hasta militares.