[4] Más tarde, sin embargo, volvió a su antigua preferencia de un gobierno autocrático.
[5] Su dictadura acabó con el monopolio político de la derecha tradicional en Grecia, con la que Metaxás mantenía una relación ambigua[5] y dio paso a una nueva que se asentó finalmente tras la guerra mundial y la guerra civil.
[7][8] Figura poco querida tanto en su época como posteriormente,[2] se ganó, sin embargo, amplio respeto por liderar a los griegos en la victoria sobre los italianos en la guerra greco-italiana del invierno de 1940-1941.
[10] Dos años más tarde, su padre, funcionario menor de origen noble —tenía el título de conde, obtenido por la familia en el siglo XVII—,[11] fue destinado a Ítaca, donde se mudó la familia y Ioannis cursó enseñanza primaria.
[14] Su carrera militar activa comenzó en la guerra por Tesalia contra el Imperio otomano en 1897,[9] que le marcó profundamente,[15] haciéndolo más escéptico hacia las aventuras nacionalistas para las que el país demostró no hallarse entonces preparado.
[16] Gracias al apadrinamiento del príncipe, pudo cursar poco después estudios en la Academia Militar Prusiana en Berlín,[16] donde estudió de 1900 a 1903,[17][9][11] perfeccionó el alemán y se consolidó como germanófilo.
[18][19] Su periodo en Berlín convirtió a Metaxás en uno de los pocos oficiales griegos con experiencia en la Europa occidental, en un admirador de la cultura y técnicas militares occidentales, especialmente las alemanas, y afianzó su intensa inclinación monárquica.
[23] A su regreso de Sofía, Metaxás se unió al príncipe heredero en el cuartel general griego en Lárisa.
[23][24] Su destacado papel en las operaciones militares acentuó la soberbia de Metaxás, reflejada en su diario y en las cartas a su esposa.
[45] El nuevo Gobierno de Panagis Tsaldaris incluyó a Metaxás como ministro del Interior.
[47][46] Metaxás apoyó a Kondylis para sofocar el golpe y en la posterior purga de oficiales venicelistas.
[48] Metaxás se unió al Gobierno efímeramente, abandonándolo ante la negativa del gabinete a aplicar «represalias sangrientas».
[49][51] Tsaldaris se había presentado como adalid de la república frente a la monarquía defendida por Metaxás.
El país, centrado en la cuestión de la monarquía, vivía, sin embargo, una profunda crisis económica.
[61] Los venicelistas lograron 141 escaños frente a los 143 de los populistas, pero estos se encontraban divididos.
Entre los segundos figuraba Metaxás, cuyo partido logró únicamente siete escaños: fue una nueva derrota electoral.
[62][54][57] Las elecciones en 1936 trajeron consigo el estancamiento de la situación política que se debatía entre Panagis Tsaldaris (populista) y Themistoklis Sophoulis (liberal).
[57][64] La situación se polarizó más todavía gracias al avance señalado del Partido Comunista Griego (KKE), inaceptable para los militares.
[66] Aunque un comité parlamentario vigilaba teóricamente al Gobierno, el poder estaba en manos de Metaxás.
Siguiendo este modelo se eliminaron los partidos políticos, los comunistas y los izquierdistas sufrieron una represión brutal (por ejemplo, el arresto de Georgios Papandreou); en total más de treinta mil personas fueron arrestadas y encarceladas, o exiliadas por motivos políticos.
[75] Las atrocidades contra los prisioneros políticos se debieron en su mayoría a la «sección especial» del ministerio de Seguridad Pública, formado por unos 1700 hombres.
[79] Consideraba su dictadura no como un fenómeno pasajero, sino como una institución permanente, como una expresión de la nación.
[86] El Gobierno de Metaxás introdujo varias medidas populistas[76] como la jornada laboral de ocho horas y algunos cambios para mejorar las condiciones laborales del trabajador o el alivio del endeudamiento.
[89] Pese a estas medidas, los griegos se movían mayoritariamente en la izquierda política, pero sin una oposición activa al régimen.
[85][75] La política fiscal, basada fundamentalmente en los impuestos indirectos, no favoreció a las clases humildes, contradiciendo sus otras medidas sociales.
[96] Los diversos políticos que se mostraron contrarios a Metaxás fueron fácilmente apartados por el aparato policial.
[89] Los populistas, que trataron de malquistar al monarca con Metaxás, fracasaron y sus principales figuras fueron deportadas.
[74] Gran Bretaña podía, además, someter a Grecia por hambre mediante el bloqueo naval o causar daños económicos tales que acabasen con su Gobierno.
[103] Tras la Guerra Mundial y el estallido de la Guerra Civil, los británicos y la derecha griega idealizaron a Metaxás, convirtiéndole en el defensor del país ante la agresión italo-germana, el aliado tradicional británico y aquel que trató de evitar los males de la democracia para un país que se describía como demasiado primitivo para adoptarla.
[104] Otros autores le consideran una figura perteneciente al fascismo que trató de llevar a cabo una transformación hacia este de la sociedad griega y que subestimó el peligro italiano, sin reforzar suficientemente las defensas frente a Mussolini.