Invasión soviética de las Islas Kuriles

La invasión fue parte de la guerra soviético-japonesa y fue decidido cuándo se abandonaron los planes para intervenir en Hokkaidō.

Las exitosas operaciones militares del Ejército Rojo en Mudanjiang y durante la invasión del sur de Sajalín crearon los requisitos previos necesarios para el desembarco de las Islas Kuriles.

Las islas fueron ocupadas por la 91.ª División de Infantería japonesa (Shiashkotán, Paramushir, Shumshu y Onekotán), la 42.ª División (Shimushiro), el 41.º Regimiento Independiente (Isla Matua), la 129.ª Brigada Independiente (Isla Urup) y la 89.ª División de Infantería (Iturup y Kunashiri).

Este fue un aterrizaje de asalto contra la resistencia japonesa.

Sin embargo, su verdadero estatus legal permanece en duda como parte de la disputa de las Islas Kuriles entre Rusia, Japón y otras partes.

El teniente general Tsutsumi Fusaki llegando al territorio controlado en las Islas Kuriles por los rusos para negociar la rendición.