Intihuatana

Intihuatana es un término quechua que significa "donde se ata (o amarra) el sol (inti)",[1]​ y se cree que servía como calendario astronómico para definir las estaciones según la sombra que daba el sol a la base de esa piedra.

A fines del siglo XVI, el Virrey del Perú Francisco de Toledo, en su afán evangelizador, ordenó la destrucción de las intihuatanas que se pudiesen encontrar.

Esto se realizó por la connotación de blasfemia que se tenía sobre la religión andina[2]​ y la importancia religiosa y política que estas construcciones tenían.

[4]​[5]​[6]​ En este último lugar, el monolito forma parte del grupo intihuatana junto con cuatro terrazas y dos recintos del tipo huayrana, dentro del sector sagrado construido sobre un montículo natural dándole un aspecto de tronco piramidal y en cuya cima se encuentra la intihuatana de Machu Picchu.

El caso llevó a una demanda por parte del INC y la solicitud de la respectiva indemnización, en el 2005.