Nota aparte corresponde también a los descendientes de franceses en el Caribe o América Central que se radicaron en Costa Rica, cuya movilidad es conforme a la visión francesa de unidad geopolítica del área.
[1] Igualmente, esta urbe es de importancia destacada para la aglomeración franco-costarricense, pues en ella se hallan casi todas las asociaciones civiles con las que cuenta la colectividad en el país.
Actualmente, la Alianza tiene dos sedes en la provincia de San José: en Barrio Amón y otra en Escazú.
Finalmente, la industria y el comercio francés fueron organizados en la Cámara de Comercio e Industria Francia-Costa Rica (Chambre de Commerce et d'Industrie Française au Costa Rica, CCI), creada en 1997 y que asocia a casi todos los negocios franceses presentes en la nación.
Dicha comunidad fue fundada en Francia en 1843 por los hermanos Théodore y Alphonse Ratisbonne de origen alsaciano.
[15] En 1879 comienzan en Alajuela su misión con 94 alumnas, trasladándose luego a San José en 1881 hasta ocupar el emblemático edificio en 1887[16] ubicado a un costado del parque nacional, el cual alberga hoy la Asamblea Legislativa y que constituye parte del patrimonio nacional de los costarricenses.
Estos encargos hechos a artistas franceses representan elementos importantes de la cohesión nacional hasta nuestros días.
Inicialmente expuesto al frente del Banco Central[23] y luego en el Ministerio de Salud, fue finalmente trasladado a su lugar actual en 1943 a sugerencia del Consejo Estudiantil de la época.
[24] Costa Rica posee una de las más cuantiosas e importantes comunidades francófonas en toda América Central.
A partir del 2014, las afinidades culturales con Francia le permitieron al país ingresar en la Organización Internacional de la Francofonía como miembro observador, junto con México, República Dominicana y Uruguay.
Su actual sede se ubica en el Barrio Amón, cuyo emblemático edificio está adscrito al registro del patrimonio histórico costarricense.
Igualmente, la Alianza participa en la vida cultural apoyando la creación local e impulsando el intercambio entre los dos países.
La negociación del Tratado Cañas-Jerez entre Costa Rica y Nicaragua se vio alentada por Félix Belly, periodista francés destacado por Mora en el proceso y que favorecía el entendimiento entre partes para la construcción de un canal interoceánico.
[2] En homenaje al Doctor Carit, se erigió un busto elaborado por el artista francés Louis Féron que se ubica en el Hospital de las Mujeres que lleva también su nombre, en Barrio Carit.
Según Annie Lemistre Pujol, historiadora y académica retirada del CNRS, a lo largo del gran siglo XIX que se extiende hasta el inicio de la Primera Guerra Mundial en 1914, Costa Rica y Francia comparten luchas en favor de la Democracia.
Al surgir la Primera Guerra Mundial, esta trajo consigo la muerte masiva de soldados.
Al final los soldados desplazan a los jefes, tanto en los monumentos como en el establecimiento de días cívicos.
Desde 1921 se le rinde homenaje al Soldado Desconocido en Francia bajo El Arco del Triunfo con la llama de fuego siempre renovada.
En 1956, en Costa Rica Gonzalo Facio, entonces presidente del Congreso, habla de Juan Santamaría como “nuestro Soldado Desconocido”.
En ese mismo año sufre un accidente en un avión de prueba, por el cual se le amputa su pierna derecha.
Fue contratado en la escuela de aviación, donde continuó piloteando y fue condecorado por el gobierno francés.