Incubadora (aparato de laboratorio)

Las incubadoras son esenciales para una gran cantidad de trabajos experimentales en biología celular, la microbiología y en biología molecular y se utilizan para cultivos celulares, tanto bacterianos como de células eucariotas.

Varias marcas de incubadoras están disponibles en el mercado para los ganaderos.

Hay maneras de sustituir una incubadora, cuando no está disponible.

El famoso científico Louis Pasteur utilizó como incubadora un pequeño hueco debajo de la escalera.

[1]​ Cuando no disponemos de un recinto cuya temperatura asegure el crecimiento celular, es necesario adquirir una incubadora seca equivalente.

La incubadora debe ser resistente a la corrosión (por ejemplo, el acero inoxidable o el aluminio anodizado resultan aceptables para una incubadora seca), y deben ser fáciles de limpiar.

Las variaciones pueden deberse a las corrientes de convección generadas en los puntos de contacto en relación con los agujeros en el estante, o pueden ser relacionados con las áreas que se enfrían más rápidamente cuando se abre la puerta.

Aunque esto no es un problema en general, los frascos y las placas de cultivos deben ser colocados en una baldosa aislada o en una bandeja de metal, para aquellos experimentos en los que la densidad uniforme sea importante.

Una incubadora para bacterias
Incubadora, en el Departamento de Microbiología de la Universidad de Kassel
Interior de una incubadora de CO 2 como las empleadas en cultivos celulares.