Al llegar a la rambla del Juncaret el portador no pudo sostener el lienzo, y vio como brotaba una lágrima del mismo, constituyendo este el primer milagro atribuido al lienzo.
Debió levantarse en un primer momento una iglesia y claustro, perteneciendo en un principio, al parecer, a la Orden de los Jerónimos.
El retablo del altar mayor es de estilo neobarroco, y fue levantado en la restauración tras la guerra civil.
En el interior del templo se encuentran sepultados el compositor Óscar Esplá y el artista Eusebio Sempere, siendo las dos únicas personalidades contemporáneas que han recibido sepultura en el monasterio.
[7] La torre es el único elemento constructivo que se conserva de la primitiva edificación, levantada en el siglo XVI.
El segundo nivel presenta a su vez una subdivisión en dos niveles, y a partir de esta altura la escalera, inicialmente de planta rectangular en su arranque, retoma un desarrollo circular.