Es un templo de estilo gótico, está formada por un arco carpanel flanqueado por columnas en cuyas enjutas aparecen dos medallones con las efigies de San Pedro y San Pablo, a la izquierda, y derecha respectivamente.
En el centro del friso se encuentra San Mateo.
Consta de una sola nave, el retablo del altar mayor, de pino sin policromar, al estilo extremeño, se atribuye a Vicente Barbadillo.
La capilla de San Juan Bautista alberga el Cristo de la Encina, un lienzo que relata un milagro acaecido en América.
Cabe destacar que el reloj que podemos apreciar no es suyo en origen sino que fue trasladado de la torre Bujaco, la cual se llamó durante un tiempo también "torre del reloj"porque desde finales del siglo XVI a finales del siglo XVIII servía de orientación temporal a aquellos vivían en la plaza pública y se dedicaban al comercio.