Diversos castillos como el de la localidad -construido en el siglo XII- reflejan esa presencia.
La peste azotó a partes importantes de Huesca y Aragón desde 1648.
Todos los soldados, cumpliendo las órdenes dadas por la oficialidad, tan pronto como vieron aparecer los trimotores se escondieron en los refugios construidos para el efecto, no así la población civil, que al no contar con tanta disciplina se mantuvo por la calle, quizás sin darle importancia al asunto, tan pronto como estas máquinas llegaron a encontrarse a la altura del pueblo un silbido largo y prolongado nos dió a entender que el bombardeo había empezado.
Efectivamente, como si cayeran relámpagos, cayeron bombas, en número tal que después de cesar el bombardeo nuestro servicio de información pudo comprobar que habían sido 81 las bombas lanzadas.
6 Mujeres y 5 niños fueron víctimas del bárbaro bombardero, solamente un soldado fue herido muy leve en el muslo derecho".
[5] El mismo comisario Francesc Roca Matamoros, en sus citadas "Memorias escritas por el comisario de Guerra de Companyia Francesc Roca Matamoros durante su exilio en México", reconoció la represión y los fusilamientos indiscriminados por parte del Bando Republicano ordenados por el jefe de su división republicana, como respuesta a los bombardeos franquistas con aviones nazis en Huerto.
En ambos casos, las fosas comunes del cementerio de Huerto no han sido intervenidas.
Viñuales había regresado a Huerto junto a otros guerrilleros desde Francia para combatir al régimen franquista con el maquis, cuando fue detectado por los vecinos de su pueblo que avisaron de su presencia y provocaron que acabase denunciado en la policía.