Historia del telescopio

La historia del telescopio como instrumento científico ha contribuido decisivamente a modelar la imagen que hoy se tiene del Universo, y se inició hacia 1609, cuando Galileo Galilei dirigió por primera vez su anteojo hacia el cielo.

En 1611, Johannes Kepler describió cómo podía fabricarse un telescopio algo distinto, con una lente en el objetivo convexa y una lente en el ocular también convexa, y ya hacia 1655, astrónomos como Christiaan Huygens estaban construyendo potentes pero poco manejables telescopios keplerianos con oculares compuestos.

La construcción del primer telescopio reflector "práctico" se le atribuye a Isaac Newton en el año 1668, con un diseño que incorporaba un pequeño espejo diagonal plano, dispuesto para desviar la luz recogida por el espejo esférico principal hacia un ocular montado en un costado del telescopio.

Las lentes acromáticas, que reducen en gran medida la aberración cromática de las lentes de los objetivos, permitiendo construir telescopios más cortos y funcionales, aparecieron por primera vez en 1733 en un telescopio fabricado por Chester Moore Hall, quien no hizo público su hallazgo.

Este hecho propició que se fabricara un número considerable de "Grandes refractores", cuyo tamaño creció con gran rapidez.

[11]​ Está bien documentado que fue en el siglo XII aproximadamente cuando en Europa se empezaron a utilizar las piedras de lectura (lentes de aumento colocadas sobre el texto a leer), así como lentes para producir fuego.

Se considera que las primeras gafas para corregir la presbicia utilizando lentes convexas se inventaron en el norte de Italia entre finales del siglo XIII y el comienzo del siglo XIV, y que la invención del uso de lentes cóncavas para corregir la miopía corresponde a Nicolás de Cusa en 1451.

"[14]​ En su obra Natural Magic publicada en 1589, escribió:[15]​ Della Porta estaba preocupado por otros asuntos en aquel momento y debió pensar que la idea de un "telescopio" no era demasiado importante.

[20]​ Sin embargo, el gobierno holandés lo recompensó generosamente por las copias de su diseño.

El senado recompensó a Galileo por su invención con un puesto vitalicio de profesor en Padua y duplicó su salario.

[23]​ El nuevo nombre tenía su origen en dos términos procedentes del idioma griego: tele = 'lejos' y skopein = 'para mirar o ver'; Teleskopos = 'visor de lo lejano'.

La única manera de superar esta limitación con altos aumentos es crear objetivos con distancias focales muy largas.

El diseño que ideó lleva su nombre: "telescopio gregoriano"; pero según su propia confesión, Gregory no tenía ninguna habilidad práctica y no pudo encontrar un óptico capaz de comprender sus ideas.

Concluyó erróneamente que la luz nunca podría ser refractada a través de una lente sin causar aberraciones cromáticas.

Tras algunos experimentos someros,[36]​ afirmó que los prismas de todos los materiales refractivos separarían los colores en una proporción constante asociada a su refracción media.

El telescopio tenía un pequeño espejo secundario convexo de sección hiperbólica, situado cerca del foco primario para reflejar la luz a través de un agujero central situado en el espejo principal.

Short se dedicó profesionalmente a fabricar telescopios (todos del tipo gregoriano), actividad que practicó primero en Edimburgo y después en Londres.

Observó los cielos con este telescopio durante unos veinte años, reemplazando el espejo varias veces.

Este proceso podía requerir mucho tiempo, ya que el pulido podía modificar la curvatura de la superficie del espejo, obligando a tener que amolarlo para darle de nuevo la forma correcta.

Se esperaba poder crear una "lente acromática" que permitiría centrar todos los colores en un solo punto, pudiendo de esta manera a su vez producir instrumentos de distancia focal más corta.

No podían construirse refractores más grandes, debido al efecto de la gravedad sobre la lente.

Dado que una lente solo puede ser mantenida en su lugar apoyada por los bordes, el centro de una gran lente se deformará hacia abajo debido a su propio peso, distorsionando significativamente la calidad de las imágenes que produce.

Esta idea fue planteada en primer lugar por Horace W. Babcock en 1953, pero su uso no se generalizó en los telescopios astronómicos hasta que los avances en la tecnología informática y en la de los detectores durante la década de 1990 hicieron posible calcular la compensación necesaria en tiempo real.

En 2015 estaban desarrollándose propuestas en este campo, pero todavía no se habían puesto en servicio.

Muchos radiotelescopios con base en tierra pueden detectar estas microondas, pero son mucho mejor estudiadas desde el espacio, debido a que el vapor de agua (incluso a grandes altitudes) debilita fuertemente su señal.

Para mejorar la baja resolución de estos dispositivos, los radiotelescopios fueron el primer sistema que utilizó la interferometría, valiéndose de que dos o más instrumentos separados a gran distancia observasen simultáneamente la misma fuente.

Satélites de rayos X posteriores incluyen al EXOSAT (1983), ROSAT (1990), Chandra (1999), y Newton (1999).

El Observatorio de rayos gamma Compton (1991) supuso una gran mejora con respecto a los detectores anteriores.

En 1995 se puso a punto esta técnica de imagen por primera vez con el Cambridge Optical Aperture Synthesis Telescope (COAST), una matriz de telescopios ópticos separados entre sí, lo que permitió obtener una mejora adicional en la resolución resultante.

[53]​ Las mismas técnicas se han aplicado en numerosas otras redes de telescopios astronómicos incluyendo el Navy Prototype Optical Interferometer, la CHARA array, y la matriz del IOTA.

Ocular de un telescopio galileano (c. 1620)
Representación temprana de un «telescopio holandés», de 1624
Presentación de una película en la que se cuenta la historia de cómo se construyeron y utilizaron los primeros telescopios rudimentarios, lo que permitió a los seres humanos mirar más lejos en el Universo que nunca.
Esquema óptico que muestra la luz siendo refractada por un recipiente de vidrio esférico lleno de agua, de la obra de Roger Bacon De multiplicatione specierum .
Escena con Galileo Galilei mostrando su telescopio a Leonardo Donato en 1609. (Pintura del siglo XIX ).
Xilografía mostrando un telescopio kepleriano con una distancia focal de 45 m, construido por Johannes Hevelius . De su libro, " Machina coelestis " (primera parte), publicado en 1673.
Recorrido de los rayos de luz en un telescopio gregoriano
Recorrido de los rayos de luz en un telescopio newtoniano
Réplica del segundo telescopio reflector de Newton, presentado a la Royal Society en 1672. [ 35 ]
Recorrido de la luz en un telescopio Cassegrain
Telescopio de William Herschel de "40-pies" de 1789, con un espejo de 1.20 m de diámetro. Ilustración de la tercera edición de la Encyclopædia Britannica , publicada en 1797.
Recorrido de la luz a través de una lente acromática
Telescopio Dollond
Telescopio Hale de 200" (5 m) de diámetro, en el Observatorio Palomar
El VLT del Observatorio Europeo Austral utiliza avanzados sistemas de óptica adaptativa para contrarrestar el efecto de distorsión de la atmósfera terrestre
Parábola de 76 m del radiotelescopio Lovell en el Observatorio Jodrell Bank