[1] En 1987, se convirtió en una de las primeras mujeres artistas en ser nominada al Premio Turner.
[2] Chadwick era conocida por "desafiar las percepciones estereotipadas del cuerpo con formas elegantes y poco convencionales.
[1] Su madre era una refugiada griega y su padre había nacido en el este de Londres.
[1] Tras dejar la escuela secundaria de Croydon, Chadwick se matriculó en un curso básico de bellas artes en el Croydon College,[1] y luego pasó a estudiar en el Brighton Polytechnic (1973-1976).
Beck Road se convirtió en una colmena de estudios caseros cuyos residentes incluían a Maureen Paley, Ray Walker y Genesis P-Orridge.
[5] Su ascenso a la esfera pública estuvo marcado por la inclusión de su obra Ego Geometria Sum (1983) en una exposición colectiva titulada Summer Show I en el Serpentine.
Sus puestos en Goldsmiths (1985-90), Chelsea College of Arts, Londres (1985-95), Central Saint Martins, Londres (1987-95) y Royal College of Art (1990-94)[5] garantizaron una importante influencia sobre el arte británico contemporáneo a finales de los 80 y los 90, específicamente sobre los Young British Artists.
[5] Esta exposición que recorrió varios lugares de Inglaterra, Escocia y Suiza, fue nominada para el Premio Turner en 1987.
En 1988, Chadwick tomó una decisión consciente de "...no representar mi cuerpo (...) declara inmediatamente el género femenino y yo quería ser más hábil".
Cada escultura toma la forma de un objeto que simboliza esa edad, por ejemplo una incubadora o un cochecito.
Estos moldes estaban unidos a unos pedestales que se basaban en un bulbo de jacinto.
[3] "Puede haber sido una travesura orinar en la nieve, pero fue un trabajo muy duro acabar con los 12 bronces", recordaba Chadwick.
"Piss Flowers me llevó dos años, en gran parte porque tuve que encontrar 12.000 libras para hacerlas".
La artista se "vendió" a hacer un programa sobre Frida Kahlo para la BBC con el fin de financiar la obra.
Doce figuras, según las notas de la artista, representan las "12 puertas del paraíso", donde ella alcanza "la unidad con todos los seres vivos".
[5] Durante la exposición apareció una pequeña fuga en la torre y, en estado de pánico, el personal del ICA colocó la columna, rompiendo una juntura.
Los periódicos difundieron este accidente, llamando la atención sobre Chadwick como una emocionante artista inconformista.
La obra es una fuente de chocolate líquido cuyo olor impregna la galería, la forma evoca tanto el falo como la flor.
[4] Cuando le preguntaron por la razón por la que había realizado esta obra, Chadwick explicó que "mi libido lo exigía", describiéndola como "un charco o materia primigenia, sexualmente indeterminada, en un estado perpetuo de flujo".
La artista desafía las nociones de una subjetividad estable y centrada, sugiriendo una constante permeabilidad del yo.
[1][15] Aunque no dieron ninguna prueba, los patólogos sugirieron una relación entre su infarto y una infección vírica que le causó una miocarditis, una inflamación del músculo cardíaco que podría haberse desencadenado en cualquier momento entre los últimos años de su vida y las últimas semanas.
[1] En 2004-2005 una retrospective del trabajo de Chadwick organizada por la Barbican Art Gallery recorrió cuatro grandes galerías.
Estas incluían, además de la Barbican Art Gallery (Londres, Reino Unido), la Liljevalch Konsthall (Estocolmo, Suiza), Kunstmuseet Trapholt (Kolding, Dinamarca) y la Manchester Art Gallery (Manchester, Reino Unido).
[17] Desde la retrospectiva organizada por el Barbican, se está empezando a comprender la magnitud de su contribución al arte británico contemporáneo.
[4] La galería Richard Saltoun en Londres, que representa a Helen Chadwick, ha seguido exponiendo la obra de la artista.