Guerras sajonas

Su principal líder, Viduquindo, resultó un duro oponente, aunque fue finalmente vencido y bautizado en el año 785.

El Irminsul puede haber sido un árbol o tocón sagrado, presumiblemente representación del pilar sobre el que se apoyan los cielos - similar al Ygdrasil de las culturas nórdicas.

La campaña de Carlomagno llegó hasta el río Weser, destruyendo a su paso varias fortalezas sajonas.

Los campesinos sajones, encabezados por Viduquindo, aprovecharon para atacar las tierras francas de la región del Rin, manteniéndose la contienda durante años.

En ese momento, toda Sajonia, excepto Nordalbingia, estaba bajo su control, aunque la paz no duraría.

En 777 convocó una Dieta nacional en Padeborn para integrar definitivamente el territorio de Sajonia en el reino franco.

Carlomagno regresó a Sajonia en 782, promulgando un nuevo código legal y nombrando condes, tanto sajones como francos.

Las leyes eran draconianas acerca de cuestiones religiosas, y la tradición pagana local quedaba en una posición muy amenazada.

Viduquindo aniquiló a un ejército franco en Süntelgebirge mientras Carlomagno se encontraba luchando contra los sorbios.

Este proceso estuvo acompañado por el establecimiento de estructuras eclesiásticas que aseguraran la conversión inicialmente brutal del pueblo sajón.

Carlomagno y los sajones, A. de Neuville, c.1869
Conversión de los sajones, A. de Neuville, c.1869-