Cuando los precios del petróleo cayeron en 1983, comenzó una depresión económica con el Viernes Negro.
Antes de su elección, Herrera Campíns fundó el partido social-cristiano moderadamente conservador COPEI.
[2] Venezuela había demostrado una vez más que a nivel electoral era una democracia en funcionamiento.
[4] Nombró al economista Leopoldo Díaz Bruzual para el Banco Central de Venezuela.
Era una jerga pseudotécnica, pero Leopoldo Díaz Bruzual fue uno de los adherentes a esta idea, si no el economista que puso en marcha la pelota "sobrecalentada".
En los Estados Unidos, el presidente Jimmy Carter estaba luchando contra las presiones inflacionarias y las tasas de interés allí, y en las naciones industrializadas en general, subieron a niveles inauditos.
Pero por la tesis del sobrecalentamiento, Díaz Bruzual aplicó una antigua ley según la cual los pagos de intereses superiores al 12% eran considerados usureros e ilegales.
Los medios de comunicación más grandes del país vetaron al presidente Campins debido a esta última medida.
Desde el gobierno se realizaron esfuerzos para lograr la pacificación de grupos guerrilleros.
[12]Meses después se retiraron las acusaciones en contra de Douglas Bravo, Carlos Betancourt, Fortunato Herrera y otros dirigentes.
[12] Durante la masacre de Cantaura fueron asesinados 23 guerrilleros en una operación conjunta entre el ejército y la DISIP.
[15]En el marco del Plan Unión se desarrollaron acciones conocidas informalmente como «operativos mariposas».
En concordancia con esa posición en 1982 se decidió no renovar el Protocolo de Puerto España firmado con el Reino Unido y la entonces Guayana británica en 1970.
Luis Herrera Campíns intentó que Venezuela entrara en el Movimiento de Países No Alineados, pero fue vetado por Guyana.