German Tenderini

[1]​ Cuando en Italia tuvo lugar la devastadora epidemia de cólera, Tenderini trabajó como voluntario para ayudar a los enfermos.

Por su destacada participación como voluntario, la corona italiana le dio un reconocimiento público y lo premiaron con el título de barón,[1]​ pero lo rechazó debido a sus ideas progresistas.

Fundó un taller-escuela para niños desvalidos donde les enseñó las técnicas de artesanía y manualidades.

Tenderini prestó servicios a esa colectividad hasta 1862 y más tarde se radicó en Santiago.

Los demás bomberos llegaron cuando las llamas abrasaron la construcción por todos sus costados y el fuego exhalaba el humo por las ventanas del teatro.

Una vez sofocado el fuego, los voluntarios pasaron revista y el único que no respondió fue Tenderini, temiéndose lo peor.

Durante la inspección al teatro se encontró el cuerpo de Tenderini calcinado entre los escombros; Quintanilla también había muerto.

German Tenderini posando con una de sus esculturas.
Busto de Tenderini en las afueras del Teatro Municipal de Santiago .