En aquella temporada tuvo mayor continuidad pero -como en los anteriores años- sin mucha efectividad: jugó 19 partidos -11 como titular- y anotó solo 3 goles.
En el año 2010 fue campeón en el fútbol peruano bajo el mando de Aníbal Ruiz y elegido el mejor extranjero de la liga siendo el máximo socio del goleador del Campeonato Descentralizado 2010 Héber Arriola.
Es recordado también por un gol de chalaca que le hizo a Deportivo Quito en la Copa Sudamericana 2010.
Junto a su compadre de Rosario, Pablo Vitti quién también fichó por ese equipo.
Con 18 goles se convirtió en el octavo máximo goleador del torneo peruano.