Sin embargo, animado por sus experiencias en teatro estudiantil, detuvo pronto sus estudios para aprender la profesión de actor.
Con la llegada del cine sonoro hizo muchos papeles de reparto, como en 1930 en El ángel azul, en 1931 en Berlin – Alexanderplatz o en 1932 en la nacionalista Morgenrot.
Con la llegada al poder del Nacionalsocialismo no obtuvo grandes compromisos teatrales, pero siguió actuando para el cine, incluso durante la Segunda Guerra Mundial.
Bienert había trabajado para esa época en unas 70 producciones cinematográficas, siendo incluido en la Gottbegnadeten-Liste, una lista de artistas representativos del Tercer Reich.
Gerhard Bienert se casó tres veces, siendo dos de sus esposas las actrices Inge Herbrecht y Hilde Volk.