El sitio era estratégico al estar ubicado cerca del nudo orográfico también llamado de Santa Tecla que, en la cuchilla Grande, es lugar de nacientes de varios importantes ríos: el Negro oriental, el Piraizito, el Santa María y el Yaguarón.
Por tal sitio entraban los contrabandistas portugueses tras previamente haber seguido el camino que une de norte a sur a Río Pardo, Encrucijada del Sur y Cazapava.
El Tratado de Madrid (1750) firmado por España y Portugal establecía que los siete pueblos misioneros al oriente del río Uruguay serían entregados a Portugal en permuta por la Colonia del Sacramento.
La fortificación fue construida con una plano de pentágono irregular por el ingeniero Bernardo Lecocq.
Un barranco servía de protección natural por el lado norte.