Frutos Delgado (fecha de n. y d. desconocidas), fue un político novohispano, nombrado gobernador interino de Yucatán por la Audiencia de México.
Tuvo el encargo durante su breve administración de escasos 10 meses de hacer el juicio de residencia a su antecesor, Rodrigo Flores de Aldana.
Se esperaba el nombramiento real para el sucesor de Rodrigo Flores de Aldana, que había tenido una gestión caracterizada por los abusos y la dureza de trato que tuvo hacia los indígenas del lugar y por las constantes disputas que se dieron entre él y los clérigo que actuaban en Yucatán.
Esto lo enemistó con los frailes franciscanos ya que las dos puertas cerradas correspondían al convento de San Francisco.
Por ello reforzó las medidas defensivas del entonces principal puerto de Yucatán e impidió que el anunciado ataque tuviera lugar.