Nacido en Málaga el 30 de junio de 1846[1] en una familia humilde y sin muchos recursos,[2][3] en su juventud marchó a Francia pero tuvo que volver a España.
[1][4] Participó en distintos periódicos y revistas de la época, como El Nuevo Día[3] —periódico malagueño del que fue fundador—[1] El Combate[2] —junto a José Paúl y Angulo—,[5] La Ilustración Republicana Federal,[4] El Pueblo,[2] La Discusión,[5] La Igualdad, El Liberal, El Imparcial, La Ilustración Ibérica o Madrid Cómico,[1] en los que usó distintos pseudónimos para firmar sus artículos, entre los que se encontraban los de «Córcholis»,[2][6] «Sansón Carrasco» y «Diego de la Fuente».
[6] Entre sus obras se encuentran Las parrandas, Navegar a todos los vientos, El nacimiento de Tirso,[7] Viruelas locas,[8] Un defecto, Llevar la corriente, Receta contra el suicidio, La madre de la criatura, Galeotito, Guzmán el Malo,[3] El primer actor,[1] Una doncella de encargo[9] o Meterse en Honduras.
[10] Muchos de sus textos son libretos de obras líricas del teatro por horas escritas en colaboración con una larga nómina de compositores de su generación como Luis Arnedo, Apolinar Brull, José Cabas Galván, José Cabas Quiles, Casimiro Espino, Josep Fayós, Manuel Fernández Caballero, Gerónimo Giménez, Isidoro Hernández, Tomás Reig y Ángel Rubio.
[1] Flores García esperaba en la estación la llegada desde Barcelona de su amigo el actor Enrique Borrás.