Francesc Xavier Ciuraneta Aymí

A causa del enfermedad de Parkinson,[6]​ presentó su renuncia, que fue aceptada por Benedicto XVI el 8 de marzo de 2007.

Ese año recibió la Cruz de Sant Jordi otorgada por la Generalidad de Cataluña.

[7]​ En la diócesis de Menorca, presidió la Asamblea Diocesana (1996-97), e impulsó la instrucción del proceso diocesano de beatificación de los mártires de la persecución religiosa española (1931-1939), que finalizó desde la diócesis de Lérida.

[9]​ Durante su actividad pastoral en la diócesis ilerdense, continuó el conflicto de los bienes de la Franja, que había comenzado años antes y que permanece pendiente de resolución.

Pasó sus últimos años en la Palma de Ebro,[10]​ su pueblo natal de las Tierras del Ebro.