En él, se garantizaba a Francia que ninguna otra potencia colonial ocuparía tierras tunecinas a cambio del compromiso de apoyar al bey, su familia y su dinastía en caso de amenaza.Ante el descontento causado por la nueva situación, la población tomó la decisión de sublevarse, siendo las protestas acalladas con una violencia extrema.Mientras, el aparato tunecino preexistente conservó cierto control institucional sobre asuntos religiosos y la gestión de bienes habices.Como consecuencia, la filiación tribal que se venía desarrollando en el territorio fue perdiendo fuerza, siendo sustituida por unos vínculos clientelares.Por lo general, los colonizadores comprendieron su misión dentro de una mission civilisatrice ("misión civilizadora"), buscando sacar el máximo beneficio posible del territorio colonizado a la vez que se dejaba claro que su cultura debía predominar sobre la local.Los primeros pasos hacia la aspiración reformista tomaron forma en 1911 y 1912 con los primeros enfrentamientos contra los colonos europeos, quienes se venían mostrando contrarios a cualquier tipo de colaboración con los nativos.[6] A finales de la década ya había surgido un Bloque Nacional, el Destour, que experimentará cambios en los años treinta, provocando una escisión en el movimiento original que dió origen al Partido Neo-Destouriano con Habib Burguiba como uno de sus hombres fuertes.[10] Paralelamente, el bey terminó aceptando, aunque tras demorarse, asignar a un nuevo Primer Ministro, Mohamed Chenik, en marzo de ese mismo año.[14] Alegaban que Burguiba había coaccionado al monarca para aceptar un sistema de votación por listas cerradas, lo que forzó al primer ministro a buscar el apoyo de la antigua metrópoli para sofocar la sublevación ante la incapacidad técnica del ejército tunecino.La victoria burguibista se materializó en unos procesos judiciales que acusaban a Yussef y sus partidarios de actividad criminal.Human Rights Watch denuncia la creciente represión electoral en el país debido a que la mayoría de opositores que anunciaron su intención de concurrir a dichas elecciones han sido o están siendo procesados por la justicia.
Delegación presente en el Congreso de Ksar Hellal (1934).
Habib Burguiba arrestado por segunda vez (abril de 1938).
Sello de Lamine Bey (Muhammad VIII al-Amin), el último rey de Túnez (1954).
Mohamed Lamine Bey. Último bey de Túnez.
Retrato oficial de Habib Burguiba (1960).
Cartel gigante de Kaïs Saied en la fachada de un edificio en Kairuán (26 de julio de 2022).
Simpatizantes del Partido Constitucional Libre se reúnen para realizar una protesta contra el referéndum constitucional (19 de junio de 2022).