Conocido por su novela experimental Última rumba en La Habana, con seis ediciones en castellano y dos en italiano, está considerada una de las obras más representativas del realismo sucio cubano.
En el año 1995 se estableció en Nueva Jersey, trabajando en diversos oficios mientras escribía una novela y artículos para varios medios de prensa.
En el 2001, publicó su novela Última rumba en La Habana, influida por exploraciones del lenguaje y la forma hechas anteriormente por Reinaldo Arenas, Guillermo Cabrera Infante, Fernando del Paso, Manuel Puig, Manolo Granados y los escritores mexicanos de la “Onda”, entre ellos, José Agustín.
Por su inmersión en el nihilismo y la amoralidad de la actual sociedad cubana, el escritor colombiano Plinio Apuleyo Mendoza, autor del prólogo a la primera edición, comparó esa novela con Viaje al fin de la noche, del escritor francés Louis-Ferdinand Céline.
En junio del 2014 fue presentada en Italia la traducción de esta obra, realizada por el escritor Marino Magliani para la editorial Il Canneto.
En el evento, la profesora Roberta Tennenini (Université de Toulouse II - Jean Jaurés, Francia) presentó el estudio semiótico titulado: “Última rumba en la Habana: estética y performatividad del «montaje sucio»”.