Federico VI de Dinamarca

Confrontado con el Reino Unido, siendo ya monarca pactó una alianza con Francia durante las Guerras Napoleónicas, que resultó en derrota y en la cesión del territorio noruego a Suecia, en 1814.

Tuvo una infancia triste, pues su madre, la reina Carolina Matilde, fue apartada de su lado en 1772 y exiliada a Alemania tras haber sostenido una relación amorosa con Johann Friedrich Struensee.

Ante la incapacidad del rey, actuó como regente hasta la muerte de Cristián VII , que tuvo lugar en 1808.

Federico se mantuvo firme en su lucha contra los ingleses durante las Guerras Napoleónicas, pese a que Dinamarca permanecía neutral.

En 1804, Napoleón Bonaparte era emperador de Francia, y en los años siguientes conquistó gran parte del continente europeo.

Dinamarca-Noruega se vio obligada a cumplir con la demanda británica y entregó toda su flota.

En 1809, cuando había síntomas de que el trono sueco quedaría sin sucesor, Federico se presentó como candidato a heredero del rey Carlos XIII, quien no tenía hijos.

Sin embargo, la elección del sucesor recayó en su primo Carlos Augusto de Suecia, y posteriormente en el mariscal francés Jean-Baptiste Jules Bernadotte.

Sin embargo, las Islas Feroe, Islandia y Groenlandia, posesiones tradicionalmente noruegas, permanecieron bajo el dominio de Dinamarca.

La guerra había dejado al país en la bancarrota y el monarca dedicó varios años a poner en orden la economía.

La censura y la supresión de la oposición, junto con la mala situación económica, determinaron un periodo gris para Dinamarca.

Incendio de la Catedral de Copenhague , durante el bombardeo británico en la Segunda Batalla de Copenhague , en 1807. Pintura de Christoffer Wilhelm Eckersberg .