La túnica reemplazó en gran medida al viejo quitón como la túnica principal de los hoplitas a fines del siglo V a. C. Se componía de dos rectángulos de tela (otros materiales también fueron utilizados), que se unían por los lados para formar un cilindro, dejando suficiente espacio en la parte superior de los brazos.
El cilindro se recogía en la cintura con un cinturón de tela con un nudo marinero, que hacía que la tela cayera sobre el cinturón, ocultándolo a la vista.
El color de la túnica variaba, pero el rojo (especialmente carmesí) era cada vez más el color estándar preferido por los hoplitas durante y después de la guerra del Peloponeso.
A Dédalo y Hefesto se los representaba principalmente vistiendo un exomis.
[1] Vestían también esta prenda los marineros y pescadores, cuyas ocupaciones requerían que quedara libre el brazo derecho.