La etnología estudia sistemáticamente y busca establecer relaciones comparativas entre las características de los diferentes pueblos humanos desde diferentes aspectos como son: Autores como Manuel Marzal (1998: 16) sostienen que Antropología Cultural, Antropología Social y Etnología son la misma disciplina.
El término "etnología" fue utilizado por primera vez por Adam František Kollár (1718-1783) en Historiae ivrisqve pvblici Regni Vngariae amoenitates, Viena, 1783.
A veces se prefiere la palabra "antropología",[2] una ciencia de la que la etnología constituiría una parte o etapa.
[5] Escribe: "Nos gusta hablar de 'pueblos sin historia' (a veces para decir que son los más felices).
Durante decenas e incluso centenares de milenios, también ha habido pueblos que han amado, odiado, sufrido, inventado y luchado.
Sin embargo, las pretensiones de tal universalismo cultural fueron criticadas por varios pensadores del XX, en particular Michel Foucault, Derrida, Althusser y Deleuze.
Entre las figuras importantes de este movimiento se encuentran Lévi-Strauss, Paul Rivet, Marcel Griaule, Germaine Dieterlen y Jean Rouch.
En su sentido actual (restringido), la etnología se refiere exclusivamente a los estudios sintéticos y las conclusiones teóricas extraídas de documentos etnográficos, con especial atención a los problemas de difusión, contactos, orígenes y reconstrucción del pasado.
El proceso etnográfico está compuesto por cuatro pasos: El producto etnográfico está compuesto por tres fases: El objetivo fundamental de la etnología es conocer pueblos distantes que parecen diferentes a nosotros (sociedades urbanas clásicas del siglo XXI).
Este objetivo no es nada nuevo, puesto que ya en el mundo clásico historiadores como Heródoto describían las diferencias y rarezas de costumbres en los persas o egipcios.
O qué decir de Marco Polo y sus viajes por Asia durante la Edad Media.
En el pasado, la etnología recogía principalmente datos materiales; se analizaban los objetos etnográficos en lugar de la cultura oral (historias, mitos).
El enfoque material se debía a que la mayoría de los etnólogos no trabajaban en universidades, como hoy, sino en museos.
Durante el periodo de investigación sobre el terreno, los etnólogos conviven estrechamente con la población local y llegan a conocer su vida cotidiana.