Demarquía

Sea individual o colectivamente, esos representantes del pueblo tomarían todas las decisiones sobre políticas públicas.Aunque sí pudiera establecerse la elección de los mismos por demarquía, atendiendo los méritos acumulados para el cargo aspirado.Por ejemplo, como hace veinticuatro siglos lo señalaba el pensador y político ateniense Isócrates (436–338 a. C.), si en un momento dado uno de estos grupos forma el uno por ciento de la población, la estococracia o demarquía asegura que ese grupo sea representado por el uno por ciento de los gobernantes, no por otro número mucho mayor o mucho menor.Por eso, en caso de infringir las normas algún gobernante estococrático, este sistema político prevé enjuiciar efectivamente a los funcionarios individuales - sin que un partido político, al que el mismo perteneciera, lo defienda obrando como grupo de presión sobre los jueces.Dicho en otras palabras, procura evitar la impunidad política por delitos cometidos durante la gestión de los gobernantes.[2]​ La estococracia o demarquía fue analizada primariamente por Jean-Jacques Rousseau y pensadores del Iluminismo.Entre los autores más relevantes de esta corriente anglosajona puede citarse también a Ernest Callenbach, A. Barnett y Peter Carty, Barbara Goodwin o, en el ámbito francés, Yves Sintomer.Los autores consagrados que han dedicado más espacio a este tipo de propuestas son Robert A. Dahl y Benjamin Barber.Razona sobre la base de que el pueblo, en democracia, desempeña dos funciones: es a la vez soberano (poder legislativo) y gobierno (poder ejecutivo); para desempeñarlas, no debería permitir distraerse de la persecución del bien común ("vues générales") atendiendo su interés particular ("vues particulières") y llevar estas al mínimo, lo que precisamente es permitido por la democracia por sorteo, o estococracia.Para Rousseau, pues, el sufragio o elección por medio de votos a partidos políticos es un engaño para dominar, originado por la aristocracia, y no podría ser democrático debido a los problemas funcionales que impone al pueblo obstaculizando su propia mejora y el acceso de personas buenas ("bons citoyens") al poder [ver sección anterior].[cita requerida] Sea una nación federal, dividida en veinte provincias y estas en departamentos o partidos municipales.Aquellos cuyo número de documento (que es más largo, o sea lleva más cifras, usualmente siete u ocho por lo menos) comienza a repetir 465, desempeñan los cargos superiores, o sea los cargos legislativos de distritos jerárquicamente superiores.Cabe aclarar que la carrera administrativa se prolonga hasta alcanzar, en los tres niveles municipal, provincial y nacional, la función inmediatamente inferior a ministro, o sea incluye hasta secretario de estado (en los niveles nacional y provincial) y secretario de área o cartera (en el nivel de partido o municipio).Finalmente, el ciudadano elegible identificado con el número 5.465.465 queda determinado como Presidente de la Nación; si hubiera otro ciudadano legalmente elegible con los números de documento 65.465.465 (lo que, con la población total tomada como ejemplo, puede ocurrir si el segundo dígito del sorteo resultare ser un número bajo, por ejemplo 1, 2, 3 o tal vez hasta 4, pero sería más frecuente a medida que aumenta la cantidad total de electores), pasaría a desempeñar la vicepresidencia de la Nación a la vez que presidirá el poder legislativo nacional.Si aun quedaran excedentes, nuevamente un segundo sorteo determinaría a cual de ellos (dos o más) habrá que relegar.(Obviamente también el escrutinio electrónico deja de existir, ya que no hay más sufragios).
Carátula de la edición revisada de De l'esprit des lois (Chatelain, Ámsterdam, 1749; razones políticas aconsejaban publicarla anónima y fuera de Francia), en cuyo Cap. II Montesquieu señala: "El sufragio por sorteo es de la naturaleza de la democracia, mientras que el sufragio por elección es de la naturaleza de la aristocracia".
El cleroterion ( griego antiguo , κληρωτήριον) es una máquina para desinsaculación utilizada en la antigua democracia ateniense para materializar el concepto de isonomía y de ese modo determinar, cada año, a los 6000 ciudadanos, varones, mayores de 30 años y repartidos en diez clases de 500 ciudadanos (1000 quedaban de reserva), que formaban el tribunal popular de los heliastas; y también a los 500 bouleutas del Consejo (a razón de cincuenta por tribu, a partir de la reforma de Clístenes). [ 5 ] [ 6 ]
Carátula de la edición original en francés de El contrato social, o los principios del derecho político , obra de la cual se dice fue uno de los muchos incitadores de la Revolución francesa .