La espuela chilena es usada por los campesinos huasos en Chile para estimular a un caballo chileno durante sus labores granjeras, paseos recreativos o la práctica deportiva y como instrumento musical[cita requerida] durante sus eventos festivos.
La espuela fue introducida al actual territorio chileno en 1540, durante una expedición liderada por el conquistador Pedro de Valdivia del Imperio español.
Este tipo derivó de la espuela nazarena, que tuvo una amplia difusión en Sudamérica durante el periodo colonial (1600-1810).
[5] En el siglo XVIII, los artesanos alemanes traídos por los jesuitas imprimieron un sello barroco, con complejos y abundantes decorados.
[6] Tiene la variante cogote de gallo, bautizada así por su similitud con la forma curva del pihuelo para evitar que la rodaja toque el suelo.