Ernst Haeusserman

En el año 1934[2]​ debutó en el Burgtheater actuando en la pieza de Geza Silberer Caprice.

El joven actor, que actuó con su padre en el film Ein Stern fällt vom Himmel (1934), siguió formando parte del Burgtheater hasta el año 1938.

Allí se casó con Johanna „Hansi“ Lothar (1918–1945), hija de Ernst Lothar, que junto con su padre había llegado a América en 1938 procedente de Suiza y París huyendo del régimen nazi,[4]​ y que había sido secretaria privada de Max Reinhardt.

[5]​ En Estados Unidos adoptó los nombres „Ernst Haeusserman“ o „Ernst Hausman“,[6]​ y trabajó en una docena de producciones cinematográficas, haciendo papeles tan pequeños que no aparecía en los títulos de reparto.

Fue enterrado, al igual que su padre, en el Cementerio Döblinger Friedhof de Viena, en una tumba dedicada (Gruppe 37, Reihe 1, Nummer 24), donde descansa junto a su segunda esposa, la actriz Susi Nicoletti, con la que se había casado en 1954.