Ernesto Francisco Bavio
Desde joven participó en la Unión Cívica Radical y a los 26 años fue elegido concejal de la capital salteña; ejerció varias veces como intendente interino.Fue arrestado en Salta y conducido detenido a Buenos Aires, logrando exiliarse en Reino Unido en 1931.[3] Aún en 1945 participó en la política interna del radicalismo, ya que firmó la “declaración de Avellaneda”, que pretendía saldar las diferencias entre sectores radicales.No obstante, este documento dividió al radicalismo en varios sectores.Tras cortas residencias en Panamá y Bolivia, regresó a su país en 1958, cuando asumió constitucionalmente el presidente Arturo Frondizi.[1] Durante la década del 60 presidió el Partido Justicialista de su provincia natal, y en 1973 rechazó su candidatura a gobernador y otras postulaciones aducionendo que "los hombres deben saber retirarse a tiempo".[1] Existe la escuela Ernesto Alejandro Bavio en Paraná,[6] una calle en la misma ciudad,[7] existe otra escuela -pública- cuyo patrono es Ernesto Bavio, en la calle Bahía Blanca 1551 de la Ciudad de Buenos Aires y una calle en el barrio porteño de Belgrano.