Fue conde de Luxemburgo, Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico desde 1308 hasta 1313 y rey de romanos a partir de 1308.
De esta unión nació Juan en 1296, llamado el Ciego (futuro conde Juan I de Luxemburgo), quien fue designado Rey de Bohemia en 1310.
[3] Se enfrentó al expansionismo de Francia y trató sin éxito de recuperar la influencia que había perdido el título imperial, especialmente en Italia, donde destacó el enfrentamiento que mantuvo con el papa Clemente V, la ciudad de Florencia y el rey Roberto de Nápoles.
[4][5] Enrique es el famoso alto Arrigo en el Paraíso de la Divina Comedia de Dante, donde se le enseña al poeta el puesto de honor que espera a Enrique en el cielo.
Sin embargo, el éxito de Enrique VII en Italia no duró, y tras su muerte, las tropas antiimperiales recuperaron el dominio de la península.