[7][8] Había ejercido hasta entonces como gobernador del Banco de Grecia.
[10] Los cambios en el Ejército y en el gobierno no lograron, sin embargo, restaurar la disciplina en las fuerzas armadas, que bullían de asociaciones monárquicas, republicanas y favorables a EAM.
[11] La posición del gobierno de Tsouderos era débil: su poder se limitaba a controlar las tropas griegas en Oriente Próximo y su legitimidad, al no ser un gobierno elegido en comicios, se debía únicamente al respaldo del monarca.
[12] La mayoría de los miembros del gabinete eran, además, contrarios al soberano.
[14] El 31 de marzo de 1944 una junta de oficiales exigió su dimisión y Venizelos se ofreció para sustituirle y negociar con el PEEA, pero la Armada se negó a aceptar a Venizelos y Tsouderos propuso mantenerse en el cargo hasta la próxima llegada del rey a El Cairo.